Carta #2 - Historias olvidadas de un cuento perdido

Publicado el
1 min de lectura
––– vistas
carta_2

Amada Caperucita,

Tomé una manzana de tu canasto.
Me cansé de esperarte.
Tenías que creerme y no dejarme abandonado en la casa de tu abuelita.
La cama se enfrió y me fui al bosque.
Ya no pueden matarme con una bala de plata en el corazón.
Tú te encargaste de quitármelo.
No sé dónde lo dejaste aunque si lo encuentro, no creo que lo ocupe.

Siempre tuyo,
- El Lobo Feroz.

¿Más de lo que publico?
Sin envío de SPAM